Hiperplasia benigna de próstata

24/10/2016

También conocido como: HBP, hipertrofia prostática benigna

¿En qué consiste?

La hiperplasia benigna de próstata (HBP), también conocida como hipertrofia prostática benigna, consiste en un aumento de tamaño de la próstata, no canceroso. La próstata es una pequeña glándula que en los varones envuelve a la uretra y produce un fluido que forma parte del semen. A medida que el tamaño de la próstata aumenta, esta va ejerciendo una presión sobre la uretra, ocasionando una disminución del flujo urinario, dificultades para iniciar la micción (emisión de orina), ganas frecuentes de orinar, y a veces, goteo al terminar de orinar.

También puede ocasionar retenciones de orina, debilitando al músculo de la vejiga urinaria y aumentando el riesgo de desarrollar una infección del tracto urinario (ITU) o de formar cálculos renales (piedras en los riñones). En formas graves de HBP, la orina puede refluir y producir una enfermedad renal. Aunque es raro, puede darse el caso de que una HBP impida que el paciente pueda orinar, situación que requiere de atención médica inmediata. La HBP también puede repercutir sobre la capacidad sexual disminuyéndola, produciendo una disfunción eréctil y también ocasionar orgasmos dolorosos e impotencia.

El tipo y la gravedad de los síntomas puede variar con el tiempo e incluso de persona a persona. En muchos casos, la HBP no evoluciona y sólo causa pequeñas molestias; en otros, tiene consecuencias importantes sobre la calidad de vida del afectado. La frecuencia de la HBP aumenta con la edad. Se estima que aproximadamente un 50% de los varones presentará algún grado de HBP al alcanzar los 60 años de edad, y que este porcentaje puede ser del 90% a los 80 años de edad. Aunque la HBP no causa cáncer de próstata, podría darse el caso de que ambas enfermedades existieran simultáneamente.

Acerca de la hiperplasia benigna de próstata

Factores de riesgo:

Los factores de riesgo de la HPB incluyen los siguientes:

  • Tener 40 años o más.
  • Historia familiar de HPB (padre o hermano).
  • Origen étnico: la HPB es menos común en hombres asiáticos que en hombres blancos y afroamericanos; los hombres afroamericanos tienen más probabilidades de desarrollar HPB a una edad más temprana que los hombres blancos.
  • Historial de problemas de salud crónicos, como obesidad, diabetes tipo 2 y enfermedades cardiacas.
  • Falta de ejercicio físico.
  • Disfunción eréctil.

Signos y síntomas:

El tipo y la gravedad de los signos y síntomas experimentados variarán de un hombre a otro y pueden variar con el tiempo. Para muchos hombres, la HPB nunca progresa más allá de una molestia de menor a moderada; para otros, puede representar un desafío importante para su calidad de vida.

La Asociación Estadounidense de Urología (AUA) ha desarrollado un cuestionario para ayudar a los hombres a evaluar la gravedad de sus síntomas urinarios y controlar la eficacia del tratamiento. Este cuestionario ha sido adoptado en todo el mundo y se conoce como Puntuación Internacional de Síntomas de Próstata (IPSS).

Las preguntas sobre IPSS abordan lo siguiente:

  • Vaciado incompleto de la vejiga.
  • Frecuencia de micción.
  • Detener e iniciar el chorro de orina.
  • Urgencia urinaria.
  • Chorro de orina débil.
  • Esfuerzo para orinar.
  • Despertarse durante la noche para orinar (nicturia).
  • Calidad de vida percibida por el hombre afectado

La HPB se convierte en una afección muy común en los hombres a medida que envejecen. Aproximadamente el 20% de los hombres entre 41 y 50 años pueden experimentar HBP. Según la Asociación Nacional para la Continencia, alrededor del 50% de los hombres tendrán algún grado de HPB cuando tengan 60 años, y hasta el 90% se verán afectados a los 85 años. Si bien la HPB no causa cáncer de próstata, ambas pueden encontrarse juntos.

Pruebas relacionadas

La evaluación de una hiperplasia benigna de próstata (HBP) requiere una detallada historia médica y familiar del individuo, además de una exploración física, un tacto rectal y una valoración de los síntomas referidos. Pueden también emplearse pruebas de laboratorio y estudios de imagen para determinar el tamaño de la próstata y descartar otras enfermedades o procesos que podrían causar o exacerbar los síntomas.

Pruebas de laboratorio

Las pruebas de laboratorio incluyen:

  • Antígeno prostático específico (PSA): el PSA es una proteína producida por las células de la próstata. El PSA suele estar elevado en varones con cáncer de próstata, pero también aumenta en la HBP, aunque moderadamente. El médico debe tener siempre en cuenta tanto la concentración de PSA en sangre como el tamaño de la glándula prostática. Si la próstata no está aumentada de tamaño o muy poco, un aumento importante del PSA es más preocupante que si la glándula es de un tamaño más o menos normal.
  • Urianálisis: para descartar una infección del tracto urinario.
  • Cultivo de orina: también para descartar una infección del tracto urinario.
  • Electrolitos, urea y creatinina sanguíneas: para evaluar la función renal.

Otras pruebas diagnósticas ajenas al laboratorio

  • Ultrasonidos: útiles para medir el tamaño de la próstata y evaluar la cantidad de orina retenida en la vejiga.
  • Cistoscopia: evaluación de la uretra y/o vejiga mediante un dispositivo flexible de pequeño diámetro.
  • Estudios del flujo y de la presión del chorro urinario: para conocer con qué velocidad se desplaza la orina por la uretra y a qué presión está sometida la vejiga cuando existe una retención de orina.
  • Biopsia prostática: se obtiene una o varias muestras de tejido prostático y se evalúa al microscopio la estructura celular, buscando células anómalas y signos que sugieran cáncer de próstata.

Tratamiento

En muchas ocasiones no es necesario tratar la hiperplasia benigna de próstata (HBP). No obstante, como la HBP puede progresar, es importante realizar un seguimiento para detectar posibles complicaciones, como infecciones y cálculos renales. Es importante consultar a un médico si se perciben molestias o si aparece sangre en la orina, dolor al orinar o no se puede orinar.

El tratamiento de la HBP debe discutirse con un urólogo, y suele incluir cirugía y/o fármacos.

Enlaces

Pruebas relacionadas:

Antígeno prostático específico (PSA)

Creatinina

Electrolitos

Urea

Urianálisis

Cultivo de orina

Estados fisiológicos y enfermedades:

Infección del tracto urinario

Cáncer de próstata

En otras webs:

Medline: Agrandamiento de la próstata

MayoClinic: Hiperplasia prostática benigna

Manual MSD: Hiperplasia benigna de la próstata (HBP)                    

National Institute on Aging (NIH): Problemas de la próstata      

Urology Care Foundation: Benign Prostatic Hyperplasia (BPH)

Pregúntenos

Thank you! Your submission has been received!
Oops! Something went wrong while submitting the form.
Pregúntenos image