Pruebas de histocompatibilidad (HLA)

5/6/2022

También conocido como: tipaje tisular, tipaje HLA, pruebas de histocompatibilidad, pruebas HLA cruzadas, identificación de anticuerpos HLA, detección de anticuerpos HLA, genotipado HLA

Nombre sistemático: antígeno leucocitario humano, tipado HLA

Aspectos generales

¿Por qué hacer el análisis?

Por lo general esta prueba se realiza en el contexto de un trasplante planificado. La prueba identifica qué antígenos y genes del sistema de histocompatibilidad leucocitario humano (HLA) ha heredado un individuo, con la finalidad principal de evaluar la compatibilidad entre donantes y receptores de órganos o de médula ósea, y para detectar los anticuerpos frente a antígenos HLA que podrían provocar el rechazo del órgano trasplantado. La prueba también puede realizarse para identificar los tipos de antígenos HLA en donantes de plaquetas para que coincidan con los receptores de transfusiones.

¿Cuándo hacer el análisis?

Normalmente el estudio se realiza en los posibles receptores de órganos sólidos o de células madre hematopoyéticas. De forma previa al trasplante, los posibles donantes de órganos se someten a pruebas para evaluar su compatibilidad con un receptor específico o se introducen sus datos en un registro nacional de donantes.  

Algunos receptores que han requerido transfusiones de plaquetas no muestran un aumento en el recuento de las mismas debido a la presencia de anticuerpos HLA. Para poder mejorar evitar esta consecuencia, los antígenos HLA de los donantes de plaquetas tienen que ser con los del receptor.

¿Qué muestra se requiere?

La determinación se realiza a partir de una muestra de sangre venosa. En algunos casos, puede realizarse a partir de una muestra obtenida frotando el interior de la mejilla con una torunda.

¿Es necesario algún tipo de preparación previa?

Para esta prueba no se necesita ninguna preparación especial.


¿Qué es lo que se analiza?

Los antígenos leucocitarios humanos (HLA) son proteínas especializadas (antígenos) que se encuentran en la superficie de todas las células del organismo, excepto en los glóbulos rojos. Los genes HLA que presenta cada individuo, codifican para los antígenos HLA presentes en sus células. Las pruebas de HLA identifican los principales antígenos HLA presentes en la superficie de las células de un individuo y los anticuerpos dirigidos contra los antígenos HLA, así como los genes que codifican para los antígenos HLA. El objetivo principal de este análisis es hacer coincidir al máximo el HLA de los donantes con el de los receptores de trasplantes para poder evitar futuras complicaciones.

En los seres humanos, los genes HLA se encuentran ubicados en una región concreta del cromosoma 6 denominada complejo mayor de histocompatibilidad (CMH). El CMH juega un papel esencial en el manejo del sistema inmunitario ya que ayuda al sistema inmunitario a distinguir qué células son "propias" y cuáles son "extrañas" o "no propias". Cualquier célula que se reconozca como "no propia" puede desencadenar una respuesta inmunitaria, incluida la producción de anticuerpos.

La prueba de anticuerpos HLA se realiza en los receptores de trasplantes para determinar si presentan anticuerpos dirigidos contra los antígenos HLA en el órgano o tejido donado. Esta prueba también se realiza a los receptores de transfusiones de plaquetas para determinar si tienen algún anticuerpo que pueda dirigirse contra las plaquetas del donante y evitar una mala respuesta a la transfusión.

En los trasplantes de médula ósea es necesario que los genes HLA de donante y de receptor sean idénticos o lo más similares posible, para así garantizar el éxito del trasplante y asegurar que no se va a producir ningún ataque contra las células del receptor; es lo que se conoce como enfermedad del injerto contra el huésped (EICH).

Los antígenos HLA y el sistema CMH juegan un papel esencial en el sistema inmune. Contribuyen a que el sistema inmune del organismo pueda distinguir entre células propias y células no propias. Cualquier célula que sea reconocida como no propia puede desencadenar una respuesta inmune, con la subsiguiente producción de anticuerpos. También se realiza el tipaje HLA en los receptores de trasplantes, para determinar si tienen anticuerpos que podrían atacar al órgano o tejido cedido por el donante.

En los trasplantes de órganos sólidos, como los trasplantes de riñón, corazón o pulmón, la compatibilidad del grupo sanguíneo ABO es fundamental. Después de hacer coincidir los tipos ABO, también es beneficioso hacer coincidir los antígenos HLA entre el donante y el receptor. A diferencia de la compatibilidad ABO, las discrepancias de tipificación HLA son menos críticas siempre que el receptor no haya desarrollado anticuerpos HLA dirigidos contra los antígenos del donante. Se pueden administrar varios medicamentos para ayudar a suprimir el sistema inmunitario del receptor a fin de minimizar el rechazo de órganos.

En los trasplantes de órganos sólidos, como riñón o pulmones, lo ideal es verificar la compatibilidad entre los antígenos del donante y del receptor. No obstante, en estos casos las incompatibilidades no son tan críticas, siempre y cuando el receptor no haya producido anticuerpos dirigidos contra los antígenos del donante. Así, se administran distintos fármacos para contribuir a la supresión o depresión del sistema inmune del receptor, minimizando de este modo el rechazo del órgano trasplantado.

A veces puede ser difícil hallar un donante que sea compatible con el receptor, ya que cada gen HLA puede presentar múltiples variantes (alelos) en una posición definida. Por ello, se dice que estos genes son muy polimórficos. Además, existen más de 200 genes que forman parte de la gran superfamilia de genes del sistema HLA. Debido a la existencia de este gran número de genes HLA y a todas sus posibles combinaciones, puede resultar muy complicado hallar un donante compatible, especialmente si el receptor tiene anticuerpos HLA.

Sin embargo, los genes HLA que se sitúan en zonas próximas, como por ejemplo en el cromosoma 6, se heredan de manera conjunta en grupos de genes conocidos como haplotipos. Así, cada niño hereda un haplotipo de cada progenitor. Por esta razón, la probabilidad de que los genes HLA sean iguales es mayor entre familiares que entre donantes no emparentados. A menudo, la máxima compatibilidad se halla en los padres, hijos o hermanos.

Para obtener más información sobre el HLA consultar el artículo sobre el universo de la genética.

Preguntas comunes

¿Cómo se utiliza?

La principal utilidad de la prueba del antígeno leucocitario humano (HLA) radica en verificar la compatibilidad entre los receptores de órganos o tejidos y sus donantes.

También se realiza un cribado en los receptores de trasplantes, para verificar si tienen anticuerpos anti HLA que podrían atacar al tejido u órgano trasplantado, como parte de una respuesta inmune.

El grado de compatibilidad entre receptor y donante varía en función del tipo de trasplante y esto determina que no siempre se analicen los mismos genes HLA ni se realicen las mismas pruebas.

De manera característica, se distinguen tres componentes de determinación de compatibilidad en las pruebas de HLA:

  • Tipaje HLA de donantes y receptores: supone la identificación de los alelos HLA ya sea mediante un análisis serológico del HLA o un análisis molecular (ADN). Se realiza en familiares que se ofrecen para donar un órgano o médula ósea, para verificar si son compatibles con el familiar que necesita la donación. Si se trata de personas que quieren ser donantes de médula ósea para quien sea que pueda necesitarla, se realiza la prueba del HLA y se guardan los datos en un registro para posteriormente poderlos comparar con los del receptor que necesite el trasplante.
  • Cribado de anticuerpos HLA en receptores: se realiza en receptores para determinar si tienen anticuerpos que podrían atacar al órgano o tejido trasplantado. Ciertos individuos han podido desarrollar anticuerpos HLA específicos al estar expuestos a antígenos no propios. Se reconocen tres motivos por los que se puede haber estado expuesto a antígenos no propios: embarazo, transfusiones de plaquetas o de sangre, o trasplantes previos. Es importante considerar la posible existencia de estos anticuerpos ya que pueden potencialmente atacar a los tejidos donados en el caso de que el donante tenga el tipo HLA correspondiente. La evaluación de anticuerpos HLA en receptores se debe realizar periódicamente para determinar si el receptor que está esperando el trasplante ha desarrollado anticuerpos HLA adicionales. También pueden analizarse los anticuerpos HLA después del trasplante para determinar si el receptor ha desarrollado nuevos anticuerpos. Los anticuerpos formados después del trasplante pueden aumentar el riesgo de fracaso del injerto.
  • Pruebas cruzadas con linfocitos (donante-específicos): se realiza esta prueba después de que se haya identificado ya al posible donante. Es útil para determinar si el receptor presenta anticuerpos frente a antígenos presentes en los linfocitos del donante. Se mezcla suero del receptor con glóbulos blancos (linfocitos T y B) del donante. Cualquier reacción que se detecte (resultado positivo) indica que la incompatibilidad entre ambos es muy probable. El resultado de estas pruebas cruzadas debe interpretarse siempre junto con la información referente a los anticuerpos HLA del receptor y el tipaje HLA del donante.

El sistema HLA constituye uno de los mecanismos implicados en el reconocimiento de antígenos propios y no propios y en la respuesta inmune frente a sustancias ajenas. Por este motivo, el estudio de los genes HLA se emplea en el diagnóstico de las enfermedades autoinmunes. El organismo puede producir una respuesta inmune anómala frente a sus propias células, generando así anticuerpos (autoanticuerpos). Se ha visto que algunas enfermedades se asocian a antígenos HLA específicos; por ejemplo, la espondilitis anquilosante o anquilopoyética se asocia a HLA-B27. El tipaje HLA también puede ser interesante para prevenir reacciones frente a ciertos medicamentos, al haberse constatado que algunos efectos colaterales indeseables se producen si existen ciertos tipos de HLA específicos.

¿Cuándo se solicita?

Receptores de trasplantes

Se analizan genes, antígenos y anticuerpos HLA en el momento en que se sabe que una persona va a necesitar un trasplante. Los resultados obtenidos del análisis de los genes y antígenos HLA no variarán a menos que una persona haya recibido un trasplante de células madre hematopoyéticas. La evaluación de anticuerpos HLA debe repetirse periódicamente y en particular después de ciertas situaciones como embarazos o transfusiones de sangre, para determinar si el potencial receptor ha desarrollado otros anticuerpos HLA. A veces las personas que reciben transfusiones de plaquetas o de sangre desarrollan anticuerpos HLA.

La determinación de anticuerpos HLA se emplea también después del trasplante para saber si el receptor ha creado anticuerpos nuevos o si ha producido gran cantidad de los anticuerpos HLA que ya tenía, dirigidos contra el órgano trasplantado del donante. La presencia de anticuerpos frente a los antígenos del donante, junto con otras evaluaciones como una biopsia tisular del órgano trasplantado, puede indicar que el receptor está rechazando el órgano trasplantado; esta información es muy importante para el médico ya que podrá actuar rápidamente para prevenir el rechazo.

Donantes de trasplantes

Se analizan genes y antígenos HLA en las personas que se ofrecen para donar a un familiar un riñón, hígado, médula ósea u otro tejido, para verificar si son compatibles con el familiar que necesita la donación. También se puede realizar la prueba de HLA en personas que quieren ser donantes de médula ósea para quien pueda necesitarla; esto es relativamente frecuente en el caso del trasplante de riñón. La tipificación del antígeno HLA también se realiza en personas no emparentadas que desean convertirse en donantes de médula ósea a través del registro de donación.

En el caso de que el órgano proceda de un donante muerto, la prueba HLA se realiza tan rápido como sea posible para identificar al receptor que puede beneficiarse del trasplante. Para garantizar la viabilidad del órgano que se va a trasplantar, debe transcurrir el mínimo plazo de tiempo posible; (por ejemplo, para el corazón y los pulmones de 4 a 6 horas pero no más de 1 a 3 días; para un riñón, de 48 a 72 horas y para un hígado, de 12 a 24 horas).

Pruebas HLA cruzadas

Se realizan cuando se ha identificado ya mediante el tipaje HLA a un posible donante. Es una prueba que se realiza justo antes del trasplante del órgano para garantizar que no existe incompatibilidad. En el caso del trasplante a partir de un donante vivo, la prueba se realiza más de una vez, en el momento en el que se ha identificado al individuo como posible donante y nuevamente justo antes de la intervención.

¿Qué significa el resultado?

En un tipaje HLA se identifican genes y antígenos HLA para determinar la compatibilidad en un trasplante de órganos o de células madre hematopoyéticas. El resultado de tipificación del receptor se compara con el del donante potencial. Los resultados indican cuantos antígenos son compatibles y cuantos no lo son. A mayor cantidad de antígenos compatibles, más probabilidades habrá de que el trasplante prospere. Si no se detecta ninguna incompatibilidad la probabilidad de que el órgano o tejido trasplantado no sea rechazado por el receptor es elevada.

El hecho de que el receptor no presente anticuerpos HLA frente a los antígenos del donante es muy importante. A mayor cantidad de anticuerpos HLA desarrollados por el receptor, mayor probabilidad de rechazo.

Un resultado positivo (reactivo) a las pruebas HLA cruzadas indica que el trasplante es de elevado riesgo. En el caso de realizarse el trasplante, el riesgo de que el receptor rechace el órgano o tejido trasplantado es elevado; el rechazo será o no tratable con fármacos inmunosupresores.

¿Hay algo más que debería saber?

El tipaje HLA se realiza en laboratorios especializados en histocompatibilidad e inmunogenética. La histocompatibilidad evalúa la compatibilidad entre donante y receptor. La inmunogenética evalúa las relaciones entre el sistema inmune, la genética y el desarrollo de enfermedades.

¿Además de la determinación de la compatibilidad entre tejidos y órganos, qué otra utilidad presenta el estudio de genes y antígenos HLA?

Históricamente, el tipaje HLA se empleaba con finalidades forenses (identificación de personas) o para determinar si existía parentesco entre personas (pruebas de paternidad). Actualmente, para estas finalidades, se dispone de pruebas moleculares más específicas. Otros usos incluyen pruebas de asociación de enfermedades y pruebas de hipersensibilidad a fármacos.

¿Existe algún motivo para evaluar un alelo HLA específico?

Sí. Algunos alelos HLA específicos se asocian a ciertas enfermedades autoinmunes. No son diagnósticos de la enfermedad, pero son de gran utilidad para confirmar o descartarla. También se han descrito asociaciones entre alelos HLA específicos e hipersensibilidad a ciertos fármacos. Los factores genéticos pueden cambiar la forma en que una dosis terapéutica de medicamento se comporta en un individuo en comparación con otros. Actualmente, la tipificación del antígeno HLA a veces se puede utilizar para seleccionar la medicación óptima, para reducir reacciones a los medicamentos y para aumentar la eficacia del tratamiento.

Algunos ejemplos de estas asociaciones incluyen:

¿Existe alguna relación entre grupo sanguíneo ABO y genes y antígenos HLA?

No. A pesar de que ambos sistemas se heredan y son importantes para garantizar la compatibilidad entre tejidos, son independientes. Los genes del sistema ABO están localizados en el cromosoma 9 mientras que los del HLA se encuentran en el cromosoma 6.

¿En qué consiste la enfermedad del injerto contra el huésped?

La enfermedad del injerto contra el huésped (EICH) aparece cuando las células del sistema inmune de la médula ósea del donante atacan a las células y tejidos del receptor del trasplante. Suele ocurrir cuando la compatibilidad HLA entre receptor y donante no es cercana, por ejemplo cuando el donante no está emparentado con el receptor. Este tipo de trasplante se llama alogénico. Si bien ocurre principalmente con trasplantes de células madre hematopoyéticas, también puede ocurrir con trasplantes de órganos sólidos.

En la EICH, un tipo de leucocitos del donante, los linfocitos T, produce una respuesta inmune contra las células y tejidos del donante. Por lo general, en el trasplante de células madre, la médula ósea del receptor ha sido destruida antes del trasplante. Dado que el receptor a menudo tiene un sistema inmunitario debilitado (inmunocomprometido), el sistema inmunitario del receptor no inicia esta respuesta.

La EICH puede ser moderada o grave, e incluso poner en peligro la vida del individuo. Los síntomas incluyen sarpullido, ampollas, diarrea e ictericia. Puede desarrollarse de manera aguda, apareciendo dentro de los primeros 100 días después del trasplante, o crónica, desarrollándose a lo largo del tiempo, generalmente a los 3-6 meses después del trasplante.

La EICH  leve es una buena señal en los trasplantes alogénicos utilizados para el tratamiento del cáncer. Significa que las células inmunitarias del donante están trabajando arduamente para destruir las células cancerosas que quedan en el receptor (también conocido como efecto injerto contra leucemia). Se ha demostrado que los receptores que tienen EICH leve tienen una menor probabilidad de recurrencia del cáncer.


Enlaces

Pruebas relacionadas:

Recuento de leucocitos

Recuento de plaquetas

Pruebas farmacogenéticas

HLA-B27

Tipaje sanguíneo

Estados fisiológicos y enfermedades:

Artritis reumatoide

Enfermedades autoinmunes

Espondilitis anquilosante

Enfermedad celíaca

Artículos:

El universo de la genética

En otras webs:

Sociedad Española de Inmunología (SEI)

Fundación Josep Carreras: La donación de médula ósea

Medline: Examen de antígenos de histocompatibilidad

Manual MSD: Sistema del antígeno leucocitario humano (HLA)                    

American Society for Histocompatibility and Immunogenetics (ASHI)

Be the Match: HLA Typing and Matching

UC Davis Transplant Center: HLA Typing/Matching


También conocido como:
HSV-1, HSV-2, HHV1, HHV2, VHS, herpes oral, herpes labial, herpes genital
Nombre sistemático: virus del herpes simple tipo 1 y tipo 2

Aspectos generales
¿Por qué hacer el análisis?
Para hacer un cribado o un diagnóstico de la infección por el virus del herpes simple (VHS).                  

Pregúntenos

Thank you! Your submission has been received!
Oops! Something went wrong while submitting the form.
Pregúntenos image